Estamos al borde de la historia, en una sociedad global donde hay un gran sufrimiento e injusticia debido al compromiso generalizado de vacunar a toda la población con vacunas contra el COVID que, según el gobierno, son seguras. Como se muestra a continuación, en verdad, cada vez hay más muertes e impactos dañinos para la salud debido a todas las vacunas contra el COVID.
Pero los gobiernos no dan crédito a los terribles impactos de las vacunas en la salud, sin importar cuántos médicos e investigadores médicos estimados presenten evidencia para detener los esfuerzos de vacunación.
Los establecimientos políticos y médicos siguen usando el mismo argumento insensible. No importa cuántas personas mueran a causa de las vacunas, a menudo a los pocos días de recibir la inyección, quienes están en el poder proclaman que se salvan más vidas con el uso de las vacunas contra el COVID que las que se pierden debido a ellas.
Miles de personas en todo el mundo han muerto a causa de las inyecciones, probablemente 100 000 o más según los datos de los CDC, la Unión Europea y otras naciones. Pero los grandes medios de comunicación, el sistema de salud pública y los políticos autoritarios ignoran en gran medida los impactos negativos de las vacunas. Colándose en el centro de atención del público, hay algunas personas famosas que mueren a causa de los disparos de los ámbitos del deporte, el entretenimiento y la política. Pero estos son fácilmente olvidados o ignorados. O vistos como excepciones, estadísticamente hablando.
Nuevo análisis de todas las principales vacunas
El médico J. Bart Classen publicó un análisis extremadamente valioso. Examinó los datos de los ensayos clínicos de los tres principales fabricantes de vacunas y descubrió que sus vacunas causan más daño que bien. Estos son los aspectos más destacados de su artículo.
Los datos fueron "reanalizados usando 'morbilidad grave por todas las causas', una medida científica de la salud, como criterio principal de valoración. La 'morbilidad grave por todas las causas' en el grupo de tratamiento y el grupo de control se calculó sumando todos los eventos graves notificados en los ensayos clínicos.
Severo Los eventos incluyeron infecciones graves con COVID-19 y todos los demás eventos adversos graves en el brazo de tratamiento y el brazo de control, respectivamente. Este análisis otorga a la reducción de las infecciones graves por COVID-19 el mismo peso que los eventos adversos de gravedad equivalente. Los resultados demuestran que ninguno de los las vacunas brindan un beneficio para la salud y todos los ensayos fundamentales muestran un aumento estadísticamente significativo en la 'morbilidad grave por todas las causas' en el grupo vacunado en comparación con el grupo placebo".
En otras palabras, encontró que cada una de las vacunas provocó eventos más graves en el grupo inmunizado que en el grupo de control. Sin seguridad
Esta fue su principal conclusión: "Según estos datos, es casi seguro que la inmunización masiva contra el COVID-19 está perjudicando la salud de la población en general. Los principios científicos dictan que la inmunización masiva con vacunas contra el COVID-19 debe detenerse de inmediato porque nos enfrentamos a una inminente catástrofe de salud pública inducida por la vacuna".
Manipulación de datos.
El truco utilizado por los CDC que se reveló en algunas publicaciones, pero no en los grandes medios, es contar las muertes de personas completamente vacunadas como no vacunadas si las muertes ocurrieron dentro de los 14 días posteriores a su vacunación final.
Su objetivo era hacer que las personas no vacunadas parecieran culpables de la pandemia que causan la propagación continua de COVID. De hecho, lo que los grandes medios produjeron para influir en la opinión pública fue que las personas no vacunadas eran el problema. Todo esto para ayudar a convencer a más personas de que se vacunen.
En verdad, la realidad médica es que las personas vacunadas mueren por dos razones. Algunos sufren graves impactos en la salud debido a las propias vacunas, como coágulos de sangre que matan a las personas por accidentes cerebrovasculares y otras enfermedades. En segundo lugar, muchos son víctimas de infecciones por COVID que pueden causar la muerte porque, con el tiempo, las vacunas se vuelven cada vez más ineficaces para proteger contra la COVID.
Para agregar más contexto a lo que han hecho los CDC, considere el siguiente informe de una revelación de un denunciante.
En su testimonio bajo juramento, afirmó tener pruebas de que 45,000 estadounidenses murieron dentro de los tres días posteriores a recibir la vacuna contra el COVID-19. La declaración es parte de una demanda de America's Frontline Doctors (AFD) contra el secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., Xavier Becerra. Ese es un número notablemente más alto que el informado por los CDC.
Según el documento jurado de la denunciante, ella es "una programadora de computadoras con experiencia en la materia en el campo de análisis de datos de atención médica, un honor que me permite acceder a los datos de Medicare y Medicaid mantenidos por los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS)".
Después de verificar los datos del sistema de seguimiento de reacciones adversas VAERS de los CDC, el denunciante se centró solo en las personas que murieron dentro de los tres días posteriores a la recepción de la vacuna.
"Es mi estimación profesional que la base de datos VAERS (Sistema de notificación de eventos adversos de vacunas), si bien es extremadamente útil, está subestimada por un factor conservador de al menos 5", agregó. Llegó a esa conclusión al examinar los datos de Medicare y Medicaid con respecto a aquellos que murieron dentro de los tres días posteriores a la vacunación
. Cabe señalar que hace algunos años, un estudio de Harvard encontró que el sistema podría estar subestimando por un factor de 10 a 100.
EJEMPLO DE POR QUÉ LA PRÁCTICA DE 12 DÍAS DE LOS CDC ES FRAUDULENTA: En enero hubo una noticia sobre la muerte del médico de Florida de 56 años, Gregory Michael, quien murió a causa de un trastorno autoinmune raro que desarrolló el 21 de diciembre, tres días después de recibir la vacuna de Pfizer. . Su esposa dijo que en su mente su muerte estaba 100% ligada a la vacuna.
Un médico se adelantó públicamente para decir que también creía que la vacuna provocó que la víctima desarrollara púrpura trombocitopénica idiopática (PTI), el trastorno sanguíneo y la hemorragia cerebral que lo mataron. El Dr. Jerry L. Spivak, experto en trastornos sanguíneos de la Universidad Johns Hopkins, que no participó en la atención del Dr. Michael, dijo: "Creo que es una certeza médica que la vacuna estaba relacionada.
Sucedió y podría volver a suceder". " Sus razones médicas fueron que el trastorno apareció rápidamente después de la inyección y "fue tan grave que hizo que su recuento de plaquetas 'disminuyera'". Durante los meses siguientes, una gran cantidad de investigaciones médicas documentaron problemas sanguíneos inducidos por la vacuna, incluido el que afectó al médico de Florida.
Todavía hay más en la corrupción de datos diseñada para enviar un mensaje engañoso al público. Una historia de julio señaló: "un médico se comunicó con el Globe y dijo que el protocolo de prueba de Scripts [sistema de atención médica] indica que no están probando a los vacunados en los hospitales; solo están probando a los no vacunados para COVID a pesar de los muchos casos de avance de COVID
El médico se puso en contacto con otro hospital e informó al Globe: 'NO HAN estado evaluando a los vacunados para COVID de manera rutinaria como lo han hecho con los no vacunados, pero SOLO cambiaron su política para comenzar a hacer esto'. ¡Increíble! ¡Así que toda esta tontería en los periódicos ha estado diciendo que los vacunados NO tienen COVID PORQUE NO SE HACEN PRUEBAS!".
Todavía hay más corrupción que reconocer.
En 2020, los CDC emitieron nuevas instrucciones para los médicos forenses, médicos forenses y médicos para dar más crédito a COVID como la causa de la muerte. Las condiciones o comorbilidades preexistentes debían registrarse en la Parte II en lugar de la Parte I de los certificados de defunción. Este fue un cambio de regla importante con respecto a los manuales de 2003 que se utilizarán para informar las muertes.
Este único cambio resultó en una inflación significativa de las muertes por COVID-19 al ordenar que el COVID-19 se incluya en la Parte I de los certificados de defunción como causa definitiva de muerte, independientemente de la evidencia que lo confirme, en lugar de incluirse en la Parte II como contribuyente a la muerte en la presencia de condiciones preexistentes, como se habría hecho usando las guías de 2003. El resultado fue una inflación significativa en los totales de muertes por COVID de hasta un 1600 % por encima de lo que habría sido si los CDC hubieran utilizado los manuales de 2003.
Como último ejemplo de corrupción de datos y deficiencias, considere lo que se reveló en una reunión reciente de enfermeras. Explicaron a qué se enfrentan en su trabajo hospitalario, lo que también ayuda a explicar por qué tantas enfermeras y médicos se han negado a vacunarse.
Una enfermera dijo que dirigía un departamento de emergencias y que era trágico que estuvieran viendo tantos ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, y que es obvio que están relacionados con las vacunas COVID-19.
Otra enfermera dijo que nunca recibió capacitación sobre cómo enviar un informe a VAERS sobre los eventos adversos de la vacuna, y que ni siquiera sabía que existía hasta que hizo algunas investigaciones por su cuenta. Ella dijo que hay presión para NO reportar lesiones y muertes por vacunas, y se tarda unos 30 minutos en completar el informe, lo que pocos hacen.
Los datos británicos e internacionales muestran la verdad de las vacunas
Un nuevo informe con datos detallados de Public Health England proporciona algunas cifras sorprendentes. Para el período del 1 de febrero al 2 de agosto hubo casos de la variante COVID Delta para 47,000 personas que habían recibido 2 dosis de vacunas y para 151,054 personas que no estaban vacunadas.
En el primer grupo de personas vacunadas hubo un total de 402 muertos. En el segundo grupo, mucho más grande, con más del triple de personas sin vacunar, solo hubo 253 muertes. En otras palabras, del total de muertes por COVID, el 61 por ciento fueron personas con todas las vacunas.
Para obtener la tasa de mortalidad, divide el número de muertes por el número total de casos de infección. Eso da una tasa de mortalidad del 86 por ciento entre los vacunados y del 17 por ciento entre los no vacunados.
Esa es una diferencia asombrosa. La tasa de mortalidad entre los vacunados fue un poco más de cinco veces mayor que la de los no vacunados.
¡Cinco veces mayor! En otras palabras, las personas no vacunadas que se infectaron estaban enormemente más seguras de morir. Demostrando que las vacunas contra el COVID no son seguras.
¿Cómo podemos explicar esta enorme diferencia en términos de ciencia médica?
También cabe señalar que se determinó que la carga viral medida en ambos grupos era la misma. Entonces, ¿por qué las personas vacunadas mueren con más frecuencia que las no vacunadas? Aquí hay algunas explicaciones plausibles.
En primer lugar, hay algo muy peligroso e inseguro en las vacunas contra el COVID asociado con las proteínas de pico que están provocando que las personas mueran a un ritmo mayor. Por ejemplo, como se discutió en otro lugar, todas las vacunas actuales se han asociado con problemas sanguíneos graves, en particular coágulos de sangre grandes y microscópicos.
Muchas personas han muerto a causa de hemorragias cerebrales y accidentes cerebrovasculares, por ejemplo. También hay muchos, muchos otros tipos de efectos secundarios adversos que causan una serie de problemas médicos.
En segundo lugar, es razonable creer que la mayoría de las personas no vacunadas han adquirido inmunidad natural a partir de alguna infección previa por COVID. Y esa inmunidad natural es mucho más protectora que la inmunidad artificial o vacuna obtenida de los pinchazos.
Su inmunidad natural se traduce en menos muertes. Sin embargo, EE. UU., como muchos otros países, no otorga crédito por la inmunidad natural a la par de la inmunidad por vacunas cuando se trata de pasaportes y mandatos de COVID. Aunque algunas naciones hacen lo correcto al seguir honestamente la ciencia.
En tercer lugar, las personas vacunadas son susceptibles a infecciones intercurrentes, lo que significa que no están protegidas contra la infección después de haberse infectado originalmente. Las vacunas COVID falsas y peligrosas no destruyen el virus ni evitan que se transmita a otros. Algunas infecciones avanzadas son letales.
Dejando a un lado los problemas con los datos de los CDC, la tasa de mortalidad encontrada en el Reino Unido para las personas vacunadas se traduce en alrededor de 1300 muertes para los estadounidenses vacunados.
De hecho, un informe de agosto reveló que los nuevos datos de los CDC indicaron que 1507 personas de las que recibieron todas las vacunas murieron. Parece que estas cifras son solo para muertes por infecciones emergentes, porque la base de datos VAERS de los CDC indica más de 6,000 muertes por vacunas (hasta el 27 de agosto) que se informan como efectos adversos de la vacuna. [Pero casi 14,000 muertes aparentemente cuando se incluyen datos fuera de los EE. UU.]
Hace solo unos días, se informó que Virginia Occidental experimentó un aumento del 25 % en las muertes de personas que recibieron todas las vacunas durante las últimas ocho semanas. Al mismo tiempo, se informó que en Massachusetts, 144 personas completamente vacunadas también murieron a causa de COVID, un aumento del 80 por ciento con respecto a varias semanas antes, y ese nuevo total se traduce en alrededor de 4800 para toda la nación. En Nueva Jersey hubo un aumento del 16 por ciento en las muertes por avances recientemente.
Los nuevos datos de Inglaterra que involucran a un gran número de personas deberían ser noticia de primera plana. Pero los grandes medios sesgados y deshonestos suprimen este tipo de datos críticos. ¿Por qué? Claramente, si las personas vacunadas mueren a un ritmo mucho más alto que las personas no vacunadas, entonces ¿por qué las personas deberían estar entusiasmadas con la vacunación inicial o las posteriores de refuerzo? No deberian. Esto es especialmente cierto para los millones de personas que tienen inmunidad natural.
Los datos de otros países merecen atención porque son aún más pruebas de las deficiencias de las vacunas contra el COVID.
En agosto, la directora de los Servicios de Salud Pública de Israel, la Dra. Sharon Alroy-Preis, anunció que la mitad de todas las infecciones por COVID-19 se encontraban entre las personas totalmente vacunadas. También están surgiendo signos de enfermedades más graves entre los vacunados completos, dijo, particularmente en los mayores de 60 años.
Unos días después, el Dr. Kobi Haviv, director del Hospital Herzog en Jerusalén, informó que el 95% de los enfermos graves de COVID-19 -19 pacientes están completamente vacunados y representan del 85% al 90% de las hospitalizaciones relacionadas con COVID en general.
Agregue estos resultados de la investigación en Israel: las personas que se vacunaron en enero y febrero tuvieron, en junio, julio y la primera quincena de agosto, entre seis y 13 veces más probabilidades de infectarse que las personas no vacunadas que se infectaron previamente con el coronavirus; es decir, personas con inmunidad natural.
En un análisis, que comparó a más de 32.000 personas en el sistema de salud, el riesgo de desarrollar COVID-19 sintomático fue 27 veces mayor entre los vacunados y el riesgo de hospitalización ocho veces mayor.
En Escocia, los datos oficiales sobre hospitalizaciones y muertes muestran que el 87% de los fallecidos por COVID-19 en la tercera ola que comenzó a principios de julio estaban vacunados.
En Irlanda, el 18 por ciento de las muertes por COVID ocurrieron en personas completamente vacunadas.
Gran artículo sobre el fracaso de las vacunas.
Este artículo reciente muestra mucha sabiduría sobre las vacunas contra el COVID; aquí hay algunos extractos.
“Las vacunas Corona no funcionan muy bien. Las estadísticas ubicuas que muestran que los vacunados disfrutan de una protección sustancial contra enfermedades graves y la muerte parecen incorrectas. los no vacunados están sujetos. Una vez que olvida los detalles específicos de la eficacia y observa el panorama general, es fácil ver dónde estamos.
Las vacunas no han reducido la mortalidad de Corona en comparación con el mismo período del año pasado en ninguna jurisdicción que yo sepa. Los países con altas tasas de vacunación ahora están viendo la misma cantidad de muertes, o más, que a principios de septiembre de 2020".
“Los vacunados permanecen sustancialmente protegidos contra enfermedades graves o la muerte, pero los no vacunados ingresan al hospital y mueren a tasas muy altas, como para compensar. Por lo tanto, Israel ha mantenido la misma tasa de letalidad de alrededor del 0,7%, antes y después vacunación."
"Las vacunas contra los coronavirus se han utilizado en animales durante décadas, y ninguna de ellas funciona muy bien. Generalmente comienzan a fallar después de unos meses. A pesar de su sofisticación técnica, nuestras vacunas de ARNm y vector contra el SARS-2 no son diferentes. Tenían cierto éxito cuando se lanzaron por primera vez, pero en todo caso eso probablemente empeoró las cosas".
"Nuestras campañas de vacunación universal funcionaron lo suficientemente bien como para acelerar los procesos evolutivos que siempre y en todas partes optimizan Corona". Eso significa que el virus sigue siendo más listo que nosotros.
“Es imposible creer que no se preveía este fracaso. Los científicos que desarrollaron las vacunas sabían con certeza cómo se desarrollarían las cosas. Por eso concluyeron los ensayos después de tres o cuatro meses y vacunaron a sus controles. Por eso han estado hablando sobre refuerzos desde el principio. Es por eso que, si escuchó con atención, nunca escuchó el eslogan Zero Covid proveniente del Equipo Vacuna. Solo los imbéciles comparativos en Team Lockdown alguna vez hablaron así ".
“Nuestros políticos y nuestros nuevos dictadores de la salud pública, por otro lado, permanecieron ajenos al potencial limitado de las vacunas. Continúan insistiendo en la vacunación universal y los pases verdes, mientras que es obvio que estos no harán nada para influir en el curso de la pandemia".
"La política de Corona en todos los países occidentales se ha desarrollado más o menos de acuerdo con el mismo guión, ideado por la Organización Mundial de la Salud a fines de febrero de 2020. Se suponía que el acto final sería la erradicación a gran escala de Corona después de la vacunación masiva. ahora está claro que esto nunca sucederá. Por primera vez desde marzo de 2020, no hay un consenso internacional obvio sobre el camino a seguir".
"Algunos países, o tal vez incluso algunos políticos prominentes o expertos en salud pública que no tienen la cabeza en alto, podrían cambiarlo todo. Todos los que no están locos deben comenzar a insistir en el mismo mensaje simple:
tenemos que vivir con Corona, siempre estará con nosotros. Los refuerzos semestrales para toda la población no resolverán nada. Solo reducirán la eficacia de las vacunas al fomentar la deriva antigénica. Las vacunas son, en el mejor de los casos, una solución solo para los ancianos y los vulnerables.
Todos recibirán Corona, incluso los vacunados, y los niños deben recibirlo mientras aún son pequeños y mientras no represente un riesgo para ellos. De esta manera, el SARS-2 se convertirá en un virus sin importancia en los próximos años". Pero, ¿sucederá eso antes de que suframos una distopía de las vacunas?
Este artículo no prestó atención a los tratamientos, pero aquí está uno de los muchos comentarios que abordaron bien este tema:
"¿Cuándo comienzan los poderes fácticos a centrarse en TRATAMIENTOS para quienes contraen covid, independientemente del estado de vacunación? Ninguna otra infección, condición , enfermedad, etc. no tiene opciones de tratamiento, a excepción de covid...
Ellos, los poderes fácticos, llegan a bloquear las opciones de tratamiento o hacer que sean increíblemente difíciles de conseguir. Ya es hora de que los diversos tratamientos estén disponibles. ... ¡¡No tienen que ser 100% exitosos, pero deberíamos tener la opción de probarlos!!"
La distopía de las vacunas vista por algunos científicos estimados
Si el material anterior lo ha deprimido, es posible que no desee seguir leyendo. Algunos grandes científicos médicos se han hecho públicos con opiniones muy negativas sobre el futuro debido al uso masivo de la vacuna COVID.
La principal entre estos pronosticadores de la fatalidad de las vacunas es la Dra. Judy Mikovits. Se hizo ampliamente vista como una denunciante concienzuda cuando habló sobre "asesinatos en masa" y dijo que 50 millones de estadounidenses morirán a causa de las vacunas.
Sus credenciales en ciencias médicas son impecables, incluido un largo período en el Instituto Nacional del Cáncer. Sus puntos de vista pueden parecer extremos para algunas personas, pero se basan en un profundo conocimiento científico y son consistentes con los pronósticos altamente aterradores de otros científicos y médicos.
Estas son algunas de sus opiniones:
Ni siquiera imagino una receta para otra cosa que no sea lo que yo consideraría un asesinato en masa en una escala en la que 50 millones de personas morirán en Estados Unidos a causa de la vacuna. Los números del XMRV (virus relacionado con el virus xenotrópico de la leucemia murina) y las lesiones por vacunas durante los (últimos) 40 años lo respaldan".
Su advertencia de que estas inyecciones pueden causar la muerte es confirmada por la Dra. Sucharit Bhakdi, investigadora galardonada y exdirectora del Instituto de Microbiología Médica e Higiene de Alemania; fue profesor de virología y microbiología durante 30 años en Alemania.
En el comunicado que se muestra a continuación, advierte que al tomar estas inyecciones, los linfocitos asesinos ya presentes en nuestro cuerpo provocarán un ataque autoinmune con terribles consecuencias para nuestra salud e incluso la muerte. Hizo esta declaración:
"El gran, gran peligro de esta vacuna es que está inyectando el gen del virus en su cuerpo. Pasará por el cuerpo e ingresará en células que no conoce. Estas células comenzarán a producir, no todo el virus, sino la proteína del virus, y estas células van a poner el desecho de ese pico de proteína frente a sus células, y los linfocitos asesinos verán el desecho, y cualquiera que no entienda que hay a ser un ataque autoinmune porque ya están los linfocitos asesinos, es con esto que te diré bye bye (muerte) porque no te das cuenta de lo que vas a hacer, vas a sembrar la semilla de reacciones autoinmunes".
La Dra. Sherri Tenpenny está certificada por la junta en medicina de emergencia y medicina manipulativa osteopática y es autora de varios libros sobre el impacto de las vacunas. Cuando se le preguntó específicamente sobre el pronóstico del Dr. Mikovits, dijo: "Si no mueren, van a sufrir lesiones graves.
Hay algunas cosas en la vida que son peores que la muerte, ya sabes, tener que vivir con hepatitis inflamatoria crónica inducida por drogas, ya sabes, tener trastornos convulsivos crónicos, enfermedades autoinmunes debilitantes. Algunas personas están tan enfermas que sería misericordioso si murieran".
Agregue a estas opiniones las advertencias del Dr. Michael Yeadon, exvicepresidente de Pfizer con un doctorado en farmacología respiratoria, y el Dr. Wolfgang Wodarg, exjefe del Departamento de Salud Pública de Alemania y doctor en neumología. Enviaron una petición urgente a la Unión Europea exigiendo que se detuvieran los estudios de la vacuna COVID-19 debido a problemas de seguridad. Identificaron específicamente los siguientes efectos secundarios graves:
Infertilidad
Reacciones alérgicas potencialmente mortales debido al polietilenglicol (PEG) que contiene la vacuna.
Reacciones inmunitarias exageradas, especialmente cuando el receptor de la vacuna se enfrenta (más tarde en la vida) con el virus "salvaje" real. Informan que estas reacciones inmunes exageradas a las vacunas corona se conocen desde hace mucho tiempo a partir de experimentos con gatos. El 100% de los gatos vacunados murieron tras contraer el virus salvaje.
Aquí hay algunos ejemplos más de predicciones terribles sobre las vacunas COVID:
Vale la pena escuchar al Dr. Luc Montagnier, virólogo francés y ganador del Premio Nobel de Medicina 2008 por su descubrimiento del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Tiene un doctorado en medicina y ha recibido más de 20 premios importantes. Montagnier se refiere al programa de vacunación masiva como un "error inaceptable" y es un "error científico además de un error médico".
Su afirmación es que "Los libros de historia mostrarán que... es la vacunación la que está creando las variantes". En otras palabras: "Hay anticuerpos, creados por la vacuna", lo que obliga al virus a "encontrar otra solución" o morir. Aquí es donde se crean las variantes. Son las variantes que "son una producción y resultado de la vacunación".
Él está hablando de la mutación y el fortalecimiento del virus a partir de un fenómeno conocido como Mejora Dependiente de Anticuerpos (ADE). ADE es un mecanismo que aumenta la capacidad de un virus para entrar en las células y provocar un empeoramiento de la enfermedad. Su conclusión: "Ante un futuro impredecible, es mejor abstenerse". Pero a la mayoría de las personas les resultará extremadamente difícil resistir todos los mandatos de coerción y vacunas.
En cuanto a la tan comentada y esperanzada inmunidad de rebaño, ha dicho: “las vacunas Pfizer, Moderna, Astra Zeneca no evitan la transmisión del virus de persona a persona y los vacunados son igual de transmisivos que los no vacunados. , la esperanza de una 'inmunidad colectiva' mediante un aumento en el número de vacunados es totalmente inútil". ADE es un mecanismo que aumenta la capacidad de un virus para entrar en las células y provocar un empeoramiento de la enfermedad. Su conclusión:
Ante un futuro impredecible, es mejor abstenerse". Pero a la mayoría de las personas les resultará extremadamente difícil resistir todos los mandatos de coerción y vacunas. En cuanto a la tan comentada y esperanzada inmunidad de rebaño, ha dicho: “las vacunas Pfizer, Moderna,
Astra Zeneca no evitan la transmisión del virus de persona a persona y los vacunados son igual de transmisivos que los no vacunados. , la esperanza de una 'inmunidad colectiva' mediante un aumento en el número de vacunados es totalmente inútil". ADE es un mecanismo que aumenta la capacidad de un virus para entrar en las células y provocar un empeoramiento de la enfermedad. Su conclusión:
Ante un futuro impredecible, es mejor abstenerse". Pero a la mayoría de las personas les resultará extremadamente difícil resistir todos los mandatos de coerción y vacunas. En cuanto a la tan comentada y esperanzada inmunidad de rebaño, ha dicho: “las vacunas Pfizer, Moderna, Astra Zeneca no evitan la transmisión del virus de persona a persona y los vacunados son igual de transmisivos que los no vacunados. , la esperanza de una 'inmunidad colectiva' mediante un aumento en el número de vacunados es totalmente inútil.
Pero a la mayoría de las personas les resultará extremadamente difícil resistir todos los mandatos de coerción y vacunas. En cuanto a la tan comentada y esperanzada inmunidad de rebaño, ha dicho: “las vacunas Pfizer, Moderna, Astra Zeneca no evitan la transmisión del virus de persona a persona y los vacunados son igual de transmisivos que los no vacunados. , la esperanza de una 'inmunidad colectiva' mediante un aumento en el número de vacunados es totalmente inútil.
Pero a la mayoría de las personas les resultará extremadamente difícil resistir todos los mandatos de coerción y vacunas. En cuanto a la tan comentada y esperanzada inmunidad de rebaño, ha dicho: “las vacunas Pfizer, Moderna, Astra Zeneca no evitan la transmisión del virus de persona a persona y los vacunados son igual de transmisivos que los no vacunados. , la esperanza de una 'inmunidad colectiva' mediante un aumento en el número de vacunados es totalmente inútil".
El Dr. Vanden Bossche tiene credenciales considerables que hacen que valga la pena considerar sus puntos de vista. Tiene un doctorado en Virología de la Universidad de Hohenheim, Alemania y ha ocupado cargos docentes en universidades de Bélgica y Alemania. Estuvo en el Centro Alemán para la Investigación de Infecciones en Colonia como Jefe de la Oficina de Desarrollo de Vacunas. Ha dicho:
"Dada la enorme cantidad de escape inmunológico que provocarán las campañas de vacunación masiva y las medidas de contención complementarias, es difícil imaginar cómo las intervenciones humanas no harían que la pandemia de COVID-19 se convirtiera en un desastre increíble para el mundo y salud individual.
Habla de 'escape inmunitario' viral selectivo donde los virus continúan siendo esparcidos por aquellos que están infectados [tanto vacunados como no vacunados] porque los anticuerpos neutralizantes no logran prevenir la replicación y eliminación del virus. Un pronóstico aterrador de Bossche es que lo peor de la pandemia aún está por venir.
Difícil de creer considerando toda la propaganda de malas noticias sobre casos, hospitalizaciones y muertes. Pero él cree que ahora estamos experimentando la calma que precede a la tormenta final. Imagina una nueva ola de infección mucho peor que cualquier cosa que hayamos visto hasta ahora, piensa Bossche.
Como sucedió esto? Habrá más mutantes o variantes a los que el sistema inmunitario adaptativo de las vacunas ofrezca poca resistencia. Al mismo tiempo habrá una disminución de la eficacia inmunitaria innata o natural. A menos que las personas tomen una serie de medidas para aumentar su inmunidad natural. Aquí está su visión general: "Solo hay una sola cosa en juego en este momento y es la supervivencia de nuestra raza humana, hablando francamente". Esta también es una opinión muy fuerte. El "programa de vacunación masiva es... incapaz de generar inmunidad colectiva". Si es cierto, hay pocas esperanzas de que termine la pandemia de COVID.
En un comentario público a los CDC el 23 de abril de 2021, la bióloga molecular y toxicóloga Dra. Janci Chunn Lindsay, Ph.D., pidió a los CDC que detuvieran de inmediato la producción y distribución de vacunas contra el covid. Citando problemas relacionados con la fertilidad, la coagulación de la sangre (coagulopatía) y el escape inmunitario, la Dra. Lindsay explicó al comité la evidencia científica que demuestra que las vacunas contra el coronavirus no son seguras.
Tiene un doctorado en bioquímica y biología molecular de la Universidad de Texas y cuenta con más de 30 años de experiencia científica, principalmente en toxicología y biología mecánica. "Siento firmemente que todas las vacunas de terapia génica deben detenerse de inmediato debido a preocupaciones de seguridad en varios frentes", dijo.
También se señaló que "las vacunas Covid podrían inducir anticuerpos de reacción cruzada contra la sincitina [una proteína], y perjudicar la fertilidad, así como los resultados del embarazo". Otro problema más fue este: "existe una fuerte evidencia de escape inmunológico, y que la inoculación bajo presión pandémica con estas vacunas con fugas está impulsando la creación de mutantes más letales que están infectando recientemente a un edad demográfica, y causando más muertes relacionadas con Covid en la población de las que habrían ocurrido sin intervención.
Es decir, hay evidencia de que las vacunas están empeorando la pandemia". y causando más muertes relacionadas con Covid en la población de las que habrían ocurrido sin intervención. Es decir, hay evidencia de que las vacunas están empeorando la pandemia". y causando más muertes relacionadas con Covid en la población de las que habrían ocurrido sin intervención. Es decir, hay evidencia de que las vacunas están empeorando la pandemia".
La Dra. Theresa Deisher advirtió sobre los peligros de que el ARNm reescriba permanentemente nuestro código genético al hacer cambios en nuestro ADN. Se graduó con honores y distinción de la Universidad de Stanford y obtuvo su Ph.D. en Fisiología Molecular y Celular del Departamento de Fisiología Molecular y Celular de la Universidad de Stanford.
Las vacunas que son ARN mensajero (ARNm), lo que hacen es actuar como un virus y secuestran la maquinaria de la célula para convertir ese ARNm en proteína. Ahora, el ARN mensajero también puede ser lo que se llama transcripción inversa en ADN. Bien, un virus de ARN usa una transcriptasa inversa en nuestras células para convertirse en ADN e insertarse permanentemente en el genoma.
Los virus pueden hacer eso. Existe la posibilidad de que el ARN mensajero se convierta en ADN y se inserte permanentemente. No es así. No tiene todos los componentes eficientes de un virus, pero existe la posibilidad espontánea.
En un ensayo de terapia génica, los expertos dijeron que el peligro es de 10 elevado a menos 13 (que es uno en un billón). Cuatro de los nueve niños (que participaron en el ensayo) tuvieron inserciones de ADN y desarrollaron leucemia. Cuatro de nueve es muy diferente de uno en un billón".
El Dr. Johan Denis, médico y homeópata de Bélgica, advierte: "Simplemente no se ha demostrado que esta vacuna sea segura. Se ha desarrollado demasiado rápido. No tenemos idea de cuáles serán los efectos a largo plazo. Se necesita mucha más investigación. Hay sin prisas ni emergencias. Posiblemente podría cambiar tu ADN. Esto es irreversible e irreparable para todas las generaciones futuras".
El informe de mayo de 57 científicos y médicos destacados envió un mensaje claro sobre las vacunas contra el COVID. “El papel recientemente identificado de la glicoproteína Spike del SARS-CoV-2 para inducir el daño endotelial característico de la COVID-19, incluso en ausencia de infección, es extremadamente relevante dado que la mayoría de las vacunas autorizadas inducen la producción de la glicoproteína Spike en los receptores.
la alta tasa de aparición de efectos adversos y la amplia gama de tipos de efectos adversos que se han informado hasta la fecha, así como el potencial de mejora de la enfermedad impulsada por la vacuna, la inmunopatología Th2, la autoinmunidad y la evasión inmune, existe una necesidad de una mejor comprensión de los beneficios y riesgos de la vacunación masiva, particularmente en los grupos que fueron excluidos en los ensayos clínicos".
"A pesar de los llamados a la precaución, las organizaciones de salud y las autoridades gubernamentales han minimizado o ignorado los riesgos de la vacunación contra el SARS-CoV-2".
"En el contexto de estas preocupaciones, proponemos detener la vacunación masiva y abrir un diálogo urgente, pluralista, crítico y con base científica sobre la vacunación contra el SARS-CoV-2 entre científicos, médicos, agencias internacionales de salud, autoridades reguladoras, gobiernos y desarrolladores de vacunas".
Conclusiones
Reflexione sobre esto por un momento: aunque probablemente hayamos entrado en la distopía de las vacunas, ¿podemos salvar a la humanidad y a nuestra sociedad?
