Esta enfermedad tan insidiosa y mortal es causada por un diminuto crecimiento vegetal derivado de personas o animales que ya padecen tuberculosis. La saliva de un paciente tuberculoso está repleta de tales gérmenes, y cuando se seca y se convierte en polvo, los gérmenes pueden agitarse y respirarse o pueden mezclarse con alimentos, por ejemplo, leche, y así penetrar en el cuerpo.
Un pañuelo seco también puede transmitir la infección. Pero estos gérmenes, aunque se transportan continuamente a los pulmones de casi todos, no se desarrollan en todos. El cuerpo sano puede resistirlos, y es sólo en el cuerpo que posee poca resistencia, debido a un estado de salud bajo, que se arraigan y así comienzan a operar.
EL TRATAMIENTO
• El aire fresco ilimitado y los alimentos buenos y nutritivos son la única cura si el paciente se lo puede permitir. Esto significa simplemente respirar cada bocanada de aire tan puro como sea posible. Se recomienda encarecidamente dormir fuera de la casa, con el lado derecho e izquierdo completamente abiertos, y con protección únicamente de la lluvia, con abundante ropa y, si es necesario, tinajas de agua caliente para suministrar el calor requerido, y cada hora de el día, en la medida de lo posible, debe pasarse al aire libre, recostado o haciendo ejercicio suave.
• La alimentación a tomar debe ser nutritiva y abundante. Un montón de leche, mantequilla y huevos deben formar la base de la dieta.
• La cama en la que yace el paciente tísico no debe estar en un rincón, sino fuera de la pared, para permitir su limpieza y ventilación. Las cortinas y alfombras son colectores de polvo; reducir el número de tales artículos tanto como sea posible. En caso de muerte por tisis, la habitación ocupada por el difunto no debe volver a utilizarse hasta que haya sido completamente desinfectada.
El piso y la carpintería deben limpiarse con plumeros húmedos y luego erosionarse con agua y jabón. Si las paredes están decoradas, el papel debe humedecerse bien, despegarse y quemarse. Si las paredes han sido blanqueadas, se debe renovar con agua de cal, que contenga un cuarto de libra de cal clorada por galón de agua de cal. La cubierta de la cama, la funda de la almohada, las mantas y las sábanas de la cama del paciente deben remojarse en agua hirviendo y luego lavarse.
• El consumo se asocia a menudo con llagas en el cuello u otras partes del cuerpo, que son extremadamente difíciles de curar. Las llagas deben empaparse diariamente en ácido acético débil tibio y cubrirse con aceite de oliva. Si no se cura por este simple medio, entonces se hará mucho menos severo.
• El pulso acelerado y la fiebre extrema, que acompañan a una consunción rápida y avanzada, a menudo pueden aliviarse en gran medida al enfriar aplicando paños refrescantes sobre el corazón. Pasar una esponja por todo el cuerpo con vinagre o ácido acético débil también refrescará mucho al paciente. Puede hacerse debajo de las sábanas, para evitar toda posibilidad de escalofríos. Los paños fríos sobre el corazón y el pecho, si causan escalofríos, pueden acompañarse con fomentos de los pies y las piernas.
• La temperatura de un paciente tísico se debe registrar tres veces al día, y si está por encima de lo normal, el paciente debe permanecer en cama hasta que se reduzca. Y cuando la temperatura baje, el ejercicio suave será muy beneficioso. Y también se debe tomar cada día un aumento gradual para caminar.
